Nao Victoria
A la conquista del mundo
zarpa cada mañana.
Se abre paso en las corrientes
de olas amenazantes.
Leva anclas,
suelta amarras,
navega.
Batiendo a estribor primero
para engañar a la suerte.
Siguiendo a babor postrero…
las caderas que se mecen.
El viento sale a su encuentro
para no perder la calma
y su pelo se convierte
en bandera desplegada.
Iza velas,
suelta lastre,
navega.
Mira segura siempre
seduciendo a las estrellas
y el sol rinde pleitesía
asomado para verla.
Surcando mares azules,
atravesando los mundos,
abordando el horizonte
de los ojos más profundos.
Vira al sur,
marca el rumbo,
navega.
Nunca encalla y todo puerto
tiene a bien su aventura.
Nada puede sostener
su salvaje singladura.
Orilla de los poetas,
náufrago de las musas,
nave de cien cañones.
Navega fuerte… andaluza.
Nao es una alegoría que representa a la mujer andaluza a través de la metáfora alusiva de una gran embarcación. El poema representa a una mujer fuerte, de carácter sólido que se enfrente a las vicisitudes del mundo con altanería y seguridad. Una mujer que eclipsa a la propia naturaleza, una mujer imparable, destacando elementos descriptivos como su pelo o sus ojos. Todo ello con términos propios del lenguaje de la navegación.
Glosario de términos:
Amarra: Cuerda con que se asegura una embarcación.
Batiendo a estribor primero… a babor postrero: A un lado primero… al otro lado después. Se refiere al movimiento pronunciado de un lado a otro de las caderas de la mujer andaluza cuando camina.
Se mecen: se mueven compasadamente de un lado a otro. Como la cuna de un bebé.
Iza: en navegación, subir con cuerdas.
Pleitesía: Veneración, admiración o alabanza.
Surcando: Ir por el mar haciendo surcos o líneas.
Vira: en navegación es cambiar de rumbo.
Encallar: en navegación es dar en arena o piedras y quedar en ellas sin movimiento.
Singladura: En navegación es distancia recorrida por una nave en veinticuatro horas.